Camino de la cruz : La letra mata

Camino de la cruz | Desolador retrato de una pequeña comunidad cristiana de corte lefebvriano. La angustia rodada con una depurada técnica angustiosa

Los hermanos alemanes que dirigen y escriben esta película se han debido quedar a gusto. Su familia perteneció a la Sociedad de San Pío X, fundada por el obispo cismático francés Marcel Lefebvre, un tipo que protestó con cierta razón al principio por las tropelías de algunos que se creían con derecho a tirar a la basura una tradición de siglos, y terminó excomulgado, consumido por una tremenda soberbia y arrogancia, que sembró de desplantes y prepotencia su relación con los Papas que intentaron que se diese cuenta de que el fin no justifica los medios y que había caminos para arreglar los asuntos. En la historia, trágica, hubo muchas vueltas y revueltas, pero no es el sitio para desarrollarlas.

El desolador retrato que hacen Dietrich y Anna Brüggemann de una pequeña comunidad cristiana (llamar católicos a semejantes zombis es una simpleza) es una terrorífica plasmación de aquello de San Pablo: “la letra mata, el Espíritu da vida». Pobre gente que convierte la vida propia y la ajena en un tormento.

Lo del Via Crucis de una niña y las estaciones es un recurso facilón, por llamarlo de algún modo. Como lo es también no usar el contrapunto.

Rodada en 14 planos secuencia con talento y buenas interpretaciones, es de esas películas que solo se ven cuando uno tiene mucho mucho interés en un tema. Un tema triste, en el que lo fácil es despachar el asunto diciendo algo así como fanatismo fundamentalista y tal y cual… Hombre, el tema tiene su desarrollo y su contexto… Y en el camino, no solo los lefebvrianos hicieron tonterías… Otros, que habían perdido la fe, se quedaron dentro de la Iglesia destrozando uno por uno sus pilares para intentar levantar un tenderete con materiales de desecho de ideologías y sistemas de pensamiento incompatibles con el mensaje de salvación de Jesucristo.

Una vez más, la delgada línea roja. Pero los Brüggemann, pobres, no están para delgadas líneas, y trazan una bien gorda, sin darse cuenta de que la métafora del Via crucis para reivindicar la autentica religiosidad como camino exigente pero alegre y cordial, no será entendida -me temo- por la inmensa mayoría de los que vean la película.

Ficha Técnica

  • Montaje: Vincent Assmann
  • Duración: 107 min.
  • Distribuidora: Caramel
  • Público adecuado: +18 años

Kreuzweg. Alemania, 2014. Estreno en España: 12/12/2014

Suscríbete a la revista FilaSiete
Reseña
s
Profesor universitario de Narrativa Audiovisual, Historia del Cine y Apreciar la belleza. Escritor