Tiempo sin aire

Tiempo sin aire: Una idea no basta

Tras Agallas (2009), Tiempo sin aire, la nueva película de Samuel Martín y Andrés Luque, cuenta una historia basada en una situación real de Colombia: la del horror ante la violencia de los paramilitares. María, una enfermera que pierde a su hija en Bolivia a manos de éstos, busca hacer justicia. Por el camino conoce a Gonzalo, el psicólogo del colegio de su hijo.

Es una pena que una buena idea se frustre. Puede pasar. Pasa en esta cinta desangelada, pobre, fallida. El story line, a ratos con aire de thriller, a ratos de melodrama, no funciona. Los puntos de giro son peregrinos y conducen a callejones sin salida.

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Hay un problema en el desarrollo de las dos tramas paralelas que protagonizan Juana Acosta (A golpes) y Adriana Ugarte (El tiempo entre costuras), en buena medida porque sus personajes están averiados y las actrices no logran arregrarlos. Carmelo Gómez está como un pulpo en un garage. El actor leonés ha comentado que abandona el cine para hacer solamente teatro. Es un buen actor, esperemos que le lleguen mejores guiones.

Sinopsis: María es una enfermera colombiana que perdió a su hija a manos de tres paramilitares y decide viajar desde Colombia acompañada por su hijo pequeño hasta Santa Cruz de Tenerife para encontrar y vengarse de uno de los asesinos. Sólo tiene una foto que encontró en su hogar destruido, un rostro, una dedicatoria y un nombre, Iván.