Cómo ven en Disney la situación del sector del entretenimiento
El pasado mes de marzo tuve la oportunidad de asistir a un desayuno de trabajo con Simón Amselem, presidente de The Walt Disney Company España y Portugal. Amselem habló sobre el “Presente y futuro del sector del entretenimiento” invitado por el IESE-IME (Institute for Media & Entertaitment) y nos ofreció la visión que Disney tiene del sector y su previsible evolución.
Según Amselem, las compañías dedicadas a la comunicación y el entretenimiento tienen que transformarse como “drones” ante la revolución digital, que ha hecho cambiar el negocio del cine de manera brusca en 10 años, mucho más porcentualmente que en los 70 anteriores.
En 2004 hubo 148 millones de espectadores en España, mientras que en 2013 fueron 70. La venta de DVD ha pasado de más de 30 millones de unidades vendidas a menos de 10, pero hubo 700 millones de descargas ilegales.
El ejecutivo de Disney señaló que la piratería no es la principal causa de la caída brutal de ventas, pero desde luego no ayuda.
La aparición y rápida extensión de los nuevos dispositivos móviles (tabletas y smartphones) ha provocado la transformación de la industria. Incluyendo a los propios fabricantes y a los creadores de contenidos y software (que se lo digan, añado yo, a las hasta hace poco muy rentables Nokia y Blackberry; y en positivo a la boyante Zinga, creadora del juego para móviles FarmVille).
Los cambios afectan a todos los sectores y hay que saber adaptarse. Ahora los productos tienen un ciclo de vida mucho más corto: hay que estar abiertos al cambio, dotando a las organizaciones de mucha flexibilidad y capacidad de innovación.
Los dos retos más importantes en la era digital son la fragmentación de las audiencias y el incremento en la producción de contenidos. La previsión es que la producción de apps crezca un 30% en los próximos años, lo que supone una facturación de unos 75.000 millones de dólares. Amselem apuntó que es un gran crecimiento pero muy concentrado: de las más de 900.000 aplicaciones existentes, el top 100 supone el 70% de los ingresos.
Ante esto… ¿qué debe hacer una compañía como Disney? Según Amselem tres cosas: liderazgo en la organización; lograr que los productos y marcas de la factoría tengan una relación emocional con el consumidor y, en tercer lugar, priorizar la innovación.
Disney tiene como objetivo duplicar el valor de sus acciones en tres años. Para lograrlo habla de creatividad, tecnología y expansión de sus actividades.
Disney quiere ser creativa pero cuidando sus valores y su tradición: Disney no puede negarse a sí misma. Por tanto, seguirá haciendo cine familiar, con valores. Eso es lo que le diferencia de otras productoras y es lo que esperan sus consumidores. En esa línea, ha comprado en los últimos 10 años tres gigantes del sector: Pixar, Marvel y Lucas Film.
Para Amselem, Pixar ha revitalizado a Disney, que pasaba por momentos difíciles con títulos que no funcionaban. Pixar, hasta su compra por Disney, solo se preocupaba por la película, y ahora tiene una visión más global, que le lleva a cuidar otras fuentes de ingresos: canales temáticos de TV, parques temáticos y, por supuesto, videojuegos y aplicaciones para móviles. Disney ya es el tercer editor de videojuegos del mundo. Quiere mejorar en la interactividad y en el transmedia.
En cuanto a la expansión y la creación de nuevos mercados, Disney mira a Rusia. Ya prevé que India crezca mucho económicamente, por eso ha comprado la productora más potente de Bollywood. Además, en 2015, abre parque en Shanghai.
El futuro tecnológico en la Era de la Comunicación apunta a un alto crecimiento de la mensajería instantánea, tipo Whatsapp, el intercambio de productos y servicios entre personas como resultado de la crisis (casas, viajes, etc.) y los displays conectados a internet insertos en neveras, puertas, coches, etc.
Parece que la empresa de Mickey Mouse tiene las cosas claras. Veremos los resultados de sus estrategias a medio y largo plazo.
Suscríbete a la revista FilaSiete