Altamira

La manipulación ideológica se apodera de una historia torpemente contada por el veterano Hugh Hudson

Altamira

Altamira: Baja mira

· Conviene detenerse en las deficiencias del guion para entender los motivos por los que Altamira es una mala película.

La historia del descubrimiento en 1879 de la Cueva de Altamira, en Santillana del Mar por un prehistoriador y paleontólogo aficionado, Marcelino Sanz de Sautuola (1831-1888), es el eje de esta historia escrita con muy poco acierto por José Luis López-Linares (el documentalista hace su primera incursión en la ficción) y Olivia Hetreed (adaptó al cine La joven de la perla, la novela de Tracy Chevalier).

Conviene empezar por ahí, por las deficiencias del guion, para entender los motivos por los que Altamira es una mala película. El anciano Hugh Hudson (Carrros de fuego) hace un trabajo tan correcto como falto de fuerza y sobrado de rimbombancia ideológica, que perjudica el ritmo y el interés de una historia que podría haber sido apasionante.


La ideología se cuela y mucho para inventarse cosas que no había por qué inventar. Convertir a Sanz de Sautuola en una especie de mártir de la España progresista y laica frente a la España reaccionaria y católica (personificada en un cura ridículo que parece recién llegado de la misma peluquería que Nosferatu) es una tremenda estupidez. Porque no fue así. Porque los que le pusieron la proa al descubridor y al catedrático de la Universidad Central de Madrid que le apoyó fueron otros. Entre ellos, académicos e intelectuales españoles alentados por algunos especialistas franceses que contaron con el apoyo en España de varios krausistas.

«No te fíes, amigo, es una trampa que nos tienden los jesuitas a los prehistoriadores para reírse de nosotros», le escribe Gabriel de Mortillet a Emile de Carthailac, principal defensor de que Altamira era un fraude.

Así las cosas, la película monta un aquelarre melodramático que infantiliza y demoniza a la mujer de Sanz de Sautuola, tan católica como su marido. Una pena, porque la foto de Alcaine es preciosa y el diseño de producción también. Los actores hacen lo que pueden con un texto y una historia disparatados.

Ficha Técnica

  • Fotografía: José Luis Alcaine
  • Montaje: Pia Di Ciaula
  • Música: Mark Knopfler, Evelyn Glennie
  • Duración: 97 min.
  • Público adecuado: +18 años
  • Distribuidora: Fox
  • España, EE.UU., Francia, 2016
  • Estreno: 1.4.2016
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