Azuloscurocasinegro

Azuloscurocasinegro: Opera prima premiada en Málaga

Azuloscurocasinegro | Jorge cuida desde hace siete años a su padre, enfermo a consecuencia de un infarto cerebral. Compagina su trabajo como portero con la búsqueda de una profesión mejor. Paula es una joven presidiaria, cuyo objetivo es quedarse embarazada -da igual de quién- para instalarse en la zona de maternidad y librarse de los malos tratos que recibe de algunas compañeras de prisión. Israel, amigo de Jorge, pierde el tiempo curioseando vidas ajenas y se pega un susto cuando descubre que su padre quizá sea gay. Antonio y Natalia (hermano y amiga de Jorge) completan este universo de personajes atrapados por sus problemas y luchando contra el destino.

Daniel Sánchez Arévalo, licenciado en Ciencias Empresariales y posteriormente formado en el Máster de Cine de la Columbia University, dirige su primer largometraje después de haber trabajado en varias series (Farmacia de guardia, Hospital Central) y de haber realizado varios cortos muy premiados (de ellos, Física II fue preseleccionado para los Oscar 2005). Su ópera prima, un dramedy, cuenta con aciertos formales, es una película fresca, con un buen pulso narrativo y agilidad, estructurada en una serie tramas y subtramas triangulares en torno al personaje principal. Parte del éxito estriba en la excelente labor de Ruiz Capillas, que proporciona un montaje vivo, con recursos como la fragmentación de planos o el entrecruzado de tramas paralelas. La interpretación está a la altura.

Hay relaciones de amistad, filiación, fraternidad, noviazgo, sexo, homosexualidad, matizados bien por la ternura, bien por el humor (algunos gags están bien conseguidos), pero tratados con un barniz de superficialidad que impide una mejor implicación emocional. Este es el punto débil de la obra: cada una de las historias de este pequeño mundo adolece de cierta madurez temática; falta forja dramática, más elaboración, para conseguir peripecias vitales unas vidas más creíbles. Sobra sentimentalismo facilón. Los desenlaces son previsibles y los personajes resultan algo planos, productos poco originales de estereotipos de moda.

Con todo, esta película ha proporcionado a Sánchez Arévalo varios premios en el Festival de Cine de Málaga, entre ellos el Premio de la Crítica y el Premio Especial del Jurado. Se perfila como un realizador comercial, con éxito de crítica y taquilla. Actualmente escribe un guión para otro director, Óscar Santos.