¡Canta 2!

¡Canta 2!: De otro mundo

· Crítica de ¡Canta 2! | Estreno 22 de diciembre de 2021.
· La animación, sin alcanzar -ni pretenderlo- las cotas de los más grandes estudios, es de muy buen nivel; de hecho, es lo mejor que ha realizado Illumination hasta la fecha.

¡Canta 2! comienza con el koala Buster Moon y su equipo representando una versión musical de Alicia en el País de las Maravillas. Desde que consiguieron el triunfo en ¡Canta! han progresado. Han triunfado en provincias. Ahora quieren pasar a las grandes ligas y triunfar en (el equivalente a) Broadway. Una cazatalentos observa la actuación y les dice que no tienen nada que hacer. Sin dejarse desanimar, se cuelan en la sede de Crystal Entertainment, propiedad del magnate Jimmy Crystal, y le convencen para que les confíe la realización de un grandioso musical de ciencia ficción llamado “De otro mundo”. Aseguran que contarán con la participación del famoso Clay Calloway. Ahora solo tienen que superar unos cuantos obstáculos de nada: montar desde cero el musical, escribir el guion, ensayar, encontrar a Clay Calloway -a quien no conocen y que lleva desaparecido quince años- y convencerlo de que vuelva a los escenarios con ellos, enseñar a bailar a Johnny… y todo eso en tres semanas.

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¡Canta 2! es el undécimo largo de Illumination Studios, empresa que empezó su andadura con Gru, mi villano favorito. Esta firma se dedica a hacer películas familiares de calidad y sin pretensión: no buscan la perfección técnica, ni la originalidad, ni la profundidad. Su objetivo es entretener, cosa que hacen muy bien, y aportar un mensaje positivo y amable al mismo tiempo: luchar por tus sueños aunque eso exija un gran esfuerzo.

La nueva entrega de Canta, como ha ocurrido con otras películas similares, supera el original: es más de lo mismo pero con unas diferencias interesantes. En primer lugar el director-guionista hace un pequeño retrato robot humorístico del mundo del espectáculo con todas sus facetas; además realiza un musical brillante combinando temas musicales, clásicos y modernos, excelentes, acompañados de una coreografía de primer nivel. Y la historia se completa con unas subtramas que dan solidez al conjunto. Deja de ser más de lo mismo para convertirse en una buena película por derecho propio. Estas subtramas además contribuyen a mantener el ritmo de un largometraje muy largo.

La animación, sin alcanzar -ni pretenderlo- las cotas de los más grandes estudios, es de muy buen nivel; de hecho, es lo mejor que ha realizado Illumination hasta la fecha. Al servicio de unas coreografías que mejoran a medida que avanza la película. Al llegar al tramo final, con el show “De otro mundo”, uno perdona/olvida la espera, es un precioso espectáculo para lucimiento de los animadores y cantantes, coronado por el dúo Ash (la puercoespín roquera) – Clay (el león maduro), Scarlett Johanssen-Bono en el mundo real, en una interpretación antológica de I still haven’t found what I am looking for. Conviene decir que las voces originales son un logro, y que el doblaje español es brillante.