Carmina y amén

Menos frescura y ritmo en una segunda parte con exceso de zafiedad

Carmina y amén

Carmina y amén: Antes muerta que «aburría»

Carmina, la madre de Paco y María León, se hizo grande hace dos años en el Festival de Cine Español de Málaga al que volvió en la última edición por la puerta grande. Tan espontánea y divertida, con un humor más negro y tal vez un guión más trabajado.

Esta vez hay un muerto por medio y el argumento llega a ser aún más delirante. Eso sí, hay más problemas de ritmo, o es que a lo mejor se ha perdido parte de la magia con la falta de novedad. El último tercio es muy excesivo y zafio, con unas intervenciones muy poco logradas. Y se echan mucho de menos los secundarios y la frescura de la primera parte (que entre otras cosas duraba 20 minutos menos y utilizaba el género de falso documental).

Sorprende que la película ganase el premio al mejor guión en Málaga ya que exceptuando algunos golpes de humor geniales (el de Carmina en moto no tiene precio), hay demasiada redundancia en los personajes y el argumento.


Carmina y amén es el final de un díptico ya que su director ha afirmado que no habrá Carmina 3. Es la hora de renovarse y Paco León tiene talento para volver a sorprendernos.

Ficha Técnica

  • Fotografía: Juan González
  • Montaje: Ana Álvarez
  • Música: Fran Martínez Cabeza de Vaca
  • Duración: 100 m.
  • Distribuidora: A Contracorriente
  • Público adecuado:+18 años (D+)
  • Estreno en España: 30.4.2014

España, 2014.

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