El Gordo y el Flaco (Stan & Ollie): Veracidad y respeto
· El Gordo y el Flaco escenifica la difícil relación que tuvieron estos dos grandes actores, en la que hubo camaradería y respeto, afecto y celos, capacidad para enervar al otro y al mismo tiempo un gran afecto.
Todo el mundo conoce a esta pareja de actores. Hemos reído a carcajadas con algunas de sus películas. Algunos dudarían antes de responder afirmativamente a la pregunta de si hicieron alguna cinta sonora. Muy pocos sabrían decir cómo acabaron.
La película del escocés Baird (Morir de pie), basada en el libro Laurel and Hardy: The British Tours, responde a estas preguntas y lo que es más importante, compone un magnífico retrato de la pareja tanto a nivel personal como profesional.
En los años 30 del pasado siglo, Laurel y Hardy seguían siendo la pareja cómica más popular del mundo, pero Hal Roach, su productor, les pagaba poco. Stan Laurel amenazó con marcharse y se encontró con que su pareja no le secundó. El resultado fue la película Zenobia, en la que Oliver Hardy actúa con Harry Langdon, que imita todo lo que puede a Laurel. Éste nunca perdonó la traición. Mucho después, una vez finalizada la II Guerra Mundial, cuando ambos estaban en horas bajas, hicieron una tentativa de reconciliación y de relanzamiento de su carrera en común. Una gira por los teatros de Gran Bretaña fue la estrategia elegida para conseguir un productor que desarrollara una película proyectada por ambos: una parodia de Robin Hood.
El Gordo y el Flaco (Stan & Ollie) supone un precioso y emocionante canto de amor al cine y a la profesión de cómico que toca con inteligencia y sensibilidad la tecla de la nostalgia. Es el homenaje a la pareja cómica que lo inventó todo y ha sido copiada mil veces sin que se les reconozca la deuda. Recuerda lo poco que dura la fama y lo rápidamente que una estrella es sustituida por otra. Escenifica la difícil relación que tuvieron estos dos grandes actores, en la que hubo camaradería y respeto, afecto y celos, capacidad para enervar al otro y al mismo tiempo un gran afecto.
Al tiempo que Baird muestra a esta pareja como personas con muchos defectos -sus mujeres están ahí para dar prueba de ello-, no deja de constatar lo grandes que fueron, aunque pertenecieran a un tiempo que parece ya pasado. Este raro milagro se debe en buena medida al trabajo y la sintonía que logran John C. Reilly y Steve Coogan. Con ayuda de los maquilladores, reviven a los célebres cómicos y encuentran la química de la pareja original.
El guion gana intensidad a medida que la historia avanza, reproduciendo situaciones semejantes a las de las películas de la pareja original. Los gags (el teatro vacío, el público, el productor, el elefante) se repiten continuamente, generando tensión dramática. El final -los finales- arranca lágrimas.
Hay bastantes películas biográficas sobre estrellas de Hollywood. La mayoría, simplemente reconstruyen una historia en torno a un actor. Esta es diferente porque se acerca a la realidad y al mito con veracidad y con respeto. Algo, por desgracia, infrecuente.
Ficha Técnica
- Dirección: Jon S. Baird,
- Guion: Jeff Pope,
- Intérpretes: Steve Coogan, Shirley Henderson, Danny Huston, John C. Reilly, Nina Arianda, Rufus Jones, Susy Kane, Stephanie Hyam, Charles Walters, Ella Kenion, Joseph Balderrama, Sophie Wardlow, Michael Haydon,
- Fotografía: Laurie Rose
- Montaje: Úna Ní Dhonghaíle, Billy Sneddon
- Música: Rolfe Kent
- Duración: 97 min.
- Público adecuado: +12 años
- Distribuidora: eOne
- Canadá, EE.UU., Reino Unido (Stan & Ollie), 2019
- Estreno: 15.3.2019