El invasor

Film noir contemporáneo, con base estructural de thriller, que intenta mostrar qué ocurre con una pirámide social descompensada en Brasil que empieza a tambalearse

El invasor (Beto Brant, 2002)

El invasor: Film noir brasileño

Sao Paulo. Marginalidad, riqueza y el intento imparable de escalar socialmente. Con ritmos de hip hop, reivindicativos y tajantes, Beto Brant muestra la emergente situación social brasileña en busca de justicia y cambio.

El invasor se mueve entre el film noir contemporáneo y la base estructural del thriller en un intento de mostrar qué ocurre con una pirámide social descompensada que empieza a tambalearse. Igual que en la novela de Marçal Aquino en la que está basada la película, Brasil aparece personificado gracias a los tres personajes protagonistas en los que supervivencia y ambición se conjugan indisolublemente en busca de soluciones inmediatas. La relación entre Iván (interpretado por Marco Rica), Gilberto (Alexandre Borges) y Anísio (Paulo Miklos) representa la posibilidad de una inversión drástica y amoral desde un punto de vista que pretende contar lo que ocurre sin profundizar en la reflexión. El asesinato, la prostitución y la lucha continua entre la desconfianza y el miedo son la base de la historia.

El invasor no pretende el estudio sino la aproximación a un testimonio de la realidad al que se acerca con una visión estética determinada. Brant dirige con seguridad la cámara y la pasea por la capital brasileña mezclando texturas, quemando la imagen y contrastando colores con técnicas digitales de filmación, que parece que están más al servicio de la moda de videoclip con escenas que saltan y se repiten, que al servicio de la coherencia. Esta opción estética sí que encaja con la banda sonora de denuncia social a la que se recurre como continuidad narrativa, pero que en algún momento cansa por su repetición y corta la poca fluidez que mantiene desde el comienzo la cinta.

El invasor es la tercera película de Beto Brant y con ella algunos hablan de trilogía en cuanto a temas y estilo. Después de Os matadores (1997) y Açao entre amigos (1998) consiguió el premio a la Mejor película Latino-American en el Festival de Sundance de 2002 y participó en la Sección Oficial de Berlín del mismo año.


El invasor (O invasor)

Brasil, 2002

Ficha Técnica

Fotografía y cámara: Toca Seabra Montaje: Manga Campion

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