El invitado

El invitado: Las 7 vidas de Denzel

El invitado | La cara de Denzel Washington lo dice todo. «¿De verdad que voy a tener que estar dos horas perdonando la vida al mundo? ¡Otra vez!». Sí, efectivamente. Esta vez de escudo protector tiene a Ryan Reynolds que es menos fuerte e inteligente que Denzel pero da igual, mejor que salgan dos guapos en el cartel, así amarramos.

Daniel Espinosa (el sueco que dejó buen sabor de boca con la reciente Dinero fácil), da el salto al cine norteamericano con un gran reparto y un guionista primerizo que pone poco ingenio y humor a una historia muy convencional de espionaje internacional. Hay que reconocer que algunas persecuciones o peleas tienen su cierta fuerza visual y sensación de realismo. Esto hace que la película no sea insoportable y se quede en bastante aburrida.

No está mal la aparición de Joel Kinnaman (el protagonista de Dinero fácil y sobre todo de la serie The Killing, hasta ahora su mejor personaje), pero llega demasiado tarde. El resto de tramas secundarias más que esbozadas son bostezadas.

El tratamiento de la sincopada «historia de amor» entre Ryan Reynolds y la francesa Nora Arnaezeder es bastante risible.

La película supone un paso atrás para Espinosa. Y una llamada de atención para Reynolds y Washington que han encadenado varias películas de bajo nivel (La linterna verde y El cambiazo, en el caso del primero, Imparable y Asalto al tren Pelham 123, por parte del segundo). Y eso al final se paga, por muy buenos actores que sean, que lo son. También lo eran Pacino y De Niro.

Lo mejor: El montaje de alguna de las innumerables peleas y persecuciones.

Lo peor: La previsible rutina de todo lo demás.