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El principio de Arquímedes

Gerardo Herrero se adentra en la vida de dos parejas vecinas que evolucionan fruto de necesidades y conflictos laborales flotando entre el éxito y el fracaso

El principio de Arquímides, de Gerardo Herrero

El principio de Arquímedes: Piedras que flotan

Densidades, cuerpos, fuerzas, empujes, un principio y cuatro personajes. La última película de Gerardo Herrero se apoya en una teoría científica vigente desde a. C. en la que el compromiso social y las relaciones personales marcan el desarrollo.

El principio de Arquímedes se presenta como un juego de rivalidades y de deseos enmarcado en una sociedad competitivamente cruel. Con un guión de la novelista Belén Gopegui (Marta y alrededores), que continúa la línea reivindicativa y de denuncia de La suerte dormida (Ángeles González-Sinde), la película se adentra en la vida de dos parejas vecinas que evolucionan fruto de necesidades y conflictos laborales flotando entre el éxito y el fracaso. Aunque los diálogos son excesivamente literarios y rompen la fluidez, en algún momento favorecen la tensión dramática ayudando a intensificar una especie de manierismo social al que Herrero responde de forma comprometida.

Marta Belaustegui (Sonia) y Blanca Oteyza (Rocío) son los personajes femeninos en torno a los que gira la historia. La primera con una actuación contenida y elegante contrasta con la fuerza interpretativa mal encaminada de Oteyza. Mientras que su paralelo masculino (Alberto Jiménez) realiza un trabajo más acorde con el estilo calmado del film, al igual que Roberto Enríquez. La banda sonora de Lucio Godoy encaja a la perfección con el significado que Gerardo Herrero quiere transmitir, pero la dirección se queda a medio camino en una mera representación del guión.


La complicación de las relaciones amorosas, la aparición de sindicatos y el ritmo lento pesan como una piedra en el agua y como en el principio de Arquímedes, la película empieza a hundir al espectador en un cierto sopor. Pero Herrero resuelve esta situación con giros de guión acertados gracias a los cuales milagrosamente la piedra vuelve a flotar, y la película se mantiene durante los 100 minutos de duración. El principio de Arquímedes es una apuesta interesante dentro de nuestro cine, en el que se agradece el espíritu crítico y el trabajo pensado.

Ficha Técnica

  • Fotografía: Alfredo Mayo
  • Montaje: Carmen Frías
  • Música: Lucio Godoy
  • País: España
  •  Año: 2004
  • Distribuidora: Alta Films
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