El taller de escritura: La clase crece, el problema continúa
· El taller de escritura ofrece una inteligente trama que evoluciona del debate sobre la cuestión social y económica del lugar, al thriller oscuro.
El director galo lleva en los genes la docencia. Sus padres eran maestros en Ardilleux. Él mismo ha impartido sus conocimientos de arte dramático en la periferia de París. De su colaboración con el profesor de francés François Bégaudeau, autor de la novela Entre les murs, hace casi una década, salió la adaptación al cine La clase (2008), en la que el propio Bégaudeau se ocupó del guion y encarnó el personaje del profesor, y que fue Palma de Oro a la mejor película en Cannes.
Aquellos niños han pasado de la adolescencia virulenta a la juventud rabiosa. Cantet los sitúa en La Ciotat, un municipio de la maravillosa región Provenza-Alpes-Costa Azul, antaño próspera por sus astilleros, hoy económicamente deprimida, y en un taller de escritura que dirige Olivia, Marina Föis (Polisse, 2011), en lugar del instituto de secundaria de su anterior filme. No son los mismos chavales, pero el director insiste en el tema de la integración y la radicalización de los jóvenes en su país. Se ve que le importa la deriva de las nuevas generaciones.
Con este tema urde, junto con Robert Campillo, una inteligente trama que evoluciona del debate sobre la cuestión social y económica del lugar, como marco para la historia de estos aprendices de escritor, al thriller oscuro, cuando el joven Antoine, adicto a los videojuegos, violento y solitario, decide no plegarse a las normas; y la profesora, en su empeño por ayudarlo, bordea la borrosa línea entre realidad y ficción (tema muy presente en las películas de este año). A partir de ahí el calado de las cuestiones que plantea la película se hace más profundo.
Cantet es un cineasta meticuloso pero libre. Suele partir de una idea o de una hipótesis a la que aplica una mirada luminosa y optimista; va creando capas de historias y personajes buscando nexos, dejándolos interactuar hasta que surgen los arcos dramáticos. En este caso, arranca con un personaje de videojuego, un soldado que dispara con una ballesta al sol y da golpes al aire, como llamada al espectador a introducirse en el universo juvenil.
El rodaje y la realización también son abiertos y sistemáticos. El cineasta galo ha explicado en alguna ocasión que el guion para él no es más que una fase que le gusta verificar con los actores que ha elegido. Todos noveles, como ya hizo en La clase, a excepción de Marina Föis que compone un personaje femenino de gran riqueza. Cantet es un magnífico director de actores. Luego, suele filmar con tres cámaras, con una graba al personaje, con las otras el ambiente, los demás personajes, los detalles, etc.
Esta forma de concebir la película como un todo creciente, en el que la realidad es la base de la inspiración, da ese resultado tan natural, espontáneo y humanista que caracteriza a su filmografía.
Ficha Técnica
- Dirección: Laurent Cantet,
- Guion: Laurent Cantet, Robin Campillo,
- Intérpretes: Marina Foïs, Matthieu Lucci, Warda Rammach, Issam Talbi, Florian Beaujean, Mamadou Doumbia, Julien Souve, Mélissa Guilbert,
- Fotografía: Pierre Milon
- Montaje: Mathilde Muyard
- Música: Bedis Tir
- Duración: 114 min.
- Público adecuado: +16 años
- Distribuidora: Golem
- Francia (L’atelier (The Workshop)), 2017
- Estreno: 18.5.2018