En el ojo de la tormenta

En el ojo de la tormenta: Historia sin personajes

En el ojo de la tormenta | Aparte de los efectos especiales, hay poco que destacar en esta película de tornados.

Steven Quale, que había trabajado con Cameron en  Titanic y Avatar, dirige para la Warner (los lanzadores de Twister y de La tormenta perfecta), esta película que consiste en recrear, con impresionantes efectos especiales, un gigantesco tornado.

Unos minutos, demasiados para una película bastante breve, sirven para presentar a una serie de personajes tópicos y sin interés: Gary, subdirector de un instituto, viudo preocupado por sus dos hijos adolescentes. Un equipo de meteorólogos, un cazador de tormentas llamado Pete, que viaja en un blindado, y como contrapunto cómico, dos alocados de esos que hacen los shows Jackass que se esfuerzan por seguir la tormenta de cerca y colgar las imágenes en youtube. Todos estos personajes tienen cámaras -o teléfonos móviles con cámara- y la acción va pasando de uno a otro intentando dar sensación de realidad.

Nada digno de mención hasta que Quale y su equipo de efectos especiales se ponen a trabajar,  y hay que descubrirse ante un trabajo bien realizado, las escenas son impresionantes. La película no tiene más pretensiones que mostrar la tormenta y eso hace. Los personajes cumplen su misión de ayudar a ver el huracán, e incluso uno de ellos, el hijo menor de Gary, resulta interesante, aunque nadie va a ver una película de catástrofes por sus personajes.

Después de la catástrofe queda un campo de ruinas y un cierto sabor amargo porque hemos visto cosas semejantes por televisión, sabemos que no es una simple ficción.