Historias de una indecisa

Historias de una indecisa | Me quiere, no me quiere, me quiere…

· Eric Lavaine ha confeccionado Historias de una indecisa con mimbres mucho más ligeros que sus comedias predecesoras.

Amable comedia que cuenta la tragedia de Juliette: desde su más tierna infancia ha sido incapaz de tomar una decisión, y a sus cuarenta años sigue junto a su padre, dejando que él y sus dos grandes amigas -una exuberante y muy frívola bloguera, y una insignificante peluquera con el marido en el paro- elijan por ella en todo. La situación se vuelve dramática cuando conoce a Paul y a Étienne, dos hombres ideales; los dos se enamoran de ella y ella no sabe elegir.

Eric Lavaine se hizo notar con Barbacoa de amigos y, dos años después, repitió faena (al menos en Francia) con Vuelta a casa de mi madre, que protagonizó Alexandra Lamy. Esta nueva película está hecha de mimbres mucho más ligeros, y está concebida para aprovechar el indiscutible talento de Lamy, que lleva esta cinta sobre sus hombros. La actriz es todo risas, buen humor, viveza y entusiasmo y sus dos camaradas, Sabrina Ouazani y Anne Marivin, están a su servicio en dos papeles simpáticos pero bien caricaturescos, cuestión de ayudarla a lucirse. Más interesante y divertido es el enfrentamiento entre Étienne y Paul (Arnaud Ducret y Jamie Bamber), cocinero el uno, banquero el otro; pragmático el primero, soñador el segundo, que logran arrancar risas de verdad.

La puesta en escena es ágil y la fotografía tiende al preciosismo. Nada original, pero es una comedia sin pretensiones, amable y bien interpretada, que no es poco.