Immortals: Lucha en el Olimpo
Para no andarnos con rodeos, Immortals cuenta mal la titanomaquia y el mito de Teseo y el Minotauro. Los titanes, seres extraordinarios que existieron antes de que los dioses lucharan con ellos por la supremacía en el Olimpo, perdieron la batalla y acabaron encerrados en el Tártaro. El último episodio de aquella historia se dio cuando el titán Hiperión hizo todo lo posible por liberar a sus hermanos, lo que le llevó a plantar cara de nuevo a los dioses.
El guión de los hermanos Parlapanides (griegos sólo por el nombre) nos presenta a un Hiperión con aspecto de matarife de taberna que, al mando de un espectacular ejército, arrasa todo lo que se pone por delante. Y cuando decimos todo nos referimos a que está decidido a acabar con humanos y dioses por igual, y para lograrlo quiere apoderarse del cotizado arco de Ares, dios de la guerra, que está en manos de un humilde campesino llamado Teseo.
Tarsem Singh (La celda) tiene en su haber una obra tan extraña como hermosa llamada The Fall: El sueño de Alexandria. En esta ocasión cuenta con un guión demasiado flojo y sus méritos se reducen a la fuerza de la composición visual, lo que conlleva algunas espectaculares batallas, herederas de Furia de titanes, de El Señor de los Anillos y de 300. Pero la propia narración, la historia, que podría ser interesante de por sí, nos deja bastante fríos.
Ficha Técnica
- Dirección: Tarsem Singh,
- Guion: Charley Parlapanides, Vlas Parlapanides,
- Intérpretes: John Hurt, Mickey Rourke, Freida Pinto, Luke Evans, Stephen Dorff, Henry Cavill, Isabel Lucas, Kellan Lutz, Robert Maillet,
- Fotografía: Brendan Galvin
- Montaje: Stuart Levy
- Música: Trevor Morris
- Duración: 110 min.
- Público adecuado: +16 años (VX-)
- Distribuidora: Universal
- EE.UU., 2011
- Estreno: 23.12.2011