Joker | Motor y gasolina

· Joker es más que una película de supervillano. Si fuera eso, mi comentario tendría otro tono. Hay hondura antropológica y sociológica. Y dolor, mucho dolor dentro de esta película triste, que te encoge el alma.

Bradley Cooper produce esta película de Todd Phillips. Coincidieron en Resacón en las Vegas en 2009 y repitieron en 2011 y 2013. Es lo primero que me llama la atención en los créditos de Joker, una película muy potente, que me resisto a sopesar como el resultado de unas cuantas casualidades. No, la solidez de Joker es la suma de un montón de decisiones acertadas, muchas de las cuales son posibles gracias a un presupuesto de 55 millones de dólares.

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Creo que la potencia de Joker se debe a un motor cinematográfico muy bueno, que funciona a toda potencia con la gasolina de un guion sorprendente, que desborda talento en su tratamiento del mito, del origen de una maldición, de una plaga, de un viaje al corazón de las tinieblas. El conductor del coche es un piloto muy experimentado, se llama Joaquin Phoenix y su trabajo es maravilloso.

Pero volvamos al motor: la música excepcional de la islandesa Hildur Guðnadóttir (Chernobyl, Sicario: El día del soldado) es la columna vertebral de de una historia vestida por el doble ganador del Oscar Mark Bridges (El hilo invisible, The Artist). El diseño de producción (la arquitecta del mundo interior de Arthur «Happy» Fleck y del espacio que se llena de su dolor y su locura, Gotham City) es de Mark Friedberg y la dirección de arte de Laura Ballinger (The Fighter, Historia de un crimen y la serie Gotham). Dos colaboradores asiduos de Phillips -por lo tanto compañeros de Resacones– llevan la foto y el montaje: Jeff Groth y Lawrence Sher. Su trabajo es sensacional: sin ellos la película no tendría el color, el tono, el movimiento y el ritmo que te mantienen cosido a la butaca con el corazón encogido durante las dos horas y 20 minutos de metraje.

Phillips y Scott Silver (8 millas, The Fighter, La hora decisiva) escriben sobre ideas que no son originales pero lo hacen de una manera que no está (o al menos no lo está de esa manera tan estremecedora) en el cómic de DC ni en ninguna de las películas de Batman, incluyendo las mejores que dirigió Christopher Nolan. Y a la vez, el guion sabe aprovechar las simetrías/correspondencias con la historia de Bruce WayneBatman: no solo temáticas (argumentales, de tramas y subtramas, de viajes de personajes), sino también estéticas, con unas texturas y unas atmósferas estremecedoras (la edición de sonido te estremece, sin el expresionismo exacerbado de Nolan, que me resulta irritante).

Joker es más que una película de supervillano. Si fuera eso, mi comentario tendría otro tono. Joker no es un cómic aunque parta de un cómic. Hay hondura antropológica y sociológica. Y dolor, mucho dolor dentro de esta película triste, que te encoge el alma con un durísimo (a ratos insoportable) retrato del viaje de una persona desgraciada golpeada por un severo trastorno de personalidad en una ciudad enferma y emponzoñada. El viaje de una víctima que se convierte en verdugo. Ves un telediario y hay imágenes que podrían ser secuencias de la película y viceversa. Y eso da mucho miedo.

Hemos dejado al piloto colgado. Baste escribir que, tras la retirada de Daniel Day-Lewis, Joaquin Phoenix es uno de los mejores actores del cine contemporáneo. Verlo moverse en esta película es algo memorable.

 

A pie de pase | Joker

Ana Sánchez de la Nieta, crítico y subdirectora de FilaSiete, nos da su primera impresión de Joker, la esperada película del famoso supervillano dirigida por Todd Phillips y protagonizada por Joaquin Phoenix, que se estrena en España hoy 4 de octubre.

Ficha Técnica

  • Fotografía: Lawrence Sher
  • Montaje: Jeff Groth
  • Música: Hildur Guðnadóttir
  • Duración: 118 min.
  • Público adecuado: +18 años (V+D)
  • Distribuidora: Warner
  • EE.UU., 2019
  • Estreno: 4.10.2019
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