Juego de ladrones

Juego de ladrones: Otro robo del siglo

· Guion tópico y previsible el de Juego de ladrones, que se apoya -en exceso- en su protagonista principal, Gerard Butler.

Christian Gudegast, guionista de Objetivo: Londres, se pone detrás de la cámara con un guion propio. Se lo tiene merecido.

Juego de ladrones cuenta un atraco imposible y (casi) perfecto. El problema que tiene esta cinta, como la de Objetivo Londres, es que Gudegast construye de una manera correcta el gran armazón, pero se olvida de los personajes, ya que los oculta tras unas formidables persecuciones y/o ensaladas de tiros. Su película podría venderse en forma de videojuego, sus personajes son el avatar elegido por el jugador: el policía duro, el policía cínico, la rubia platino, el atracador simpático, el atracador desagradable… ninguno de ellos tiene entidad ni despierta un mínimo de empatía (o interés).

Guion tópico, previsible, que se apoya -en exceso- en su protagonista principal, Gerard Butler; cinta excesivamente larga, pero que a pesar de todo resulta entretenida a base de acción y tiros.

Sinopsis

Todos los días, el banco de la Reserva Federal de Los Angeles mueve la escalofriante cifra de 120 millones de dólares en efectivo. Un grupo de expertos ladrones planea su gran atraco final: hacerse con esos 120 millones, pero el departamento del Sheriff de Los Angeles, la brigada más temida de la ciudad, no está dispuesto a ponérselo fácil.