La mujer del chatarrero: El ojo compasivo y crítico de Tanovic
La mujer del chatarrero | Tanovic huye del artificio y utiliza una estética realista: sin música, con la cámara al hombro y contando con los protagonistas del hecho real como actores
Para los parias, el estado de supervivencia es lo habitual. De ahí el irónico título que Danis Tanovic ha dado a su película. Un documental dramático con estructura narrativa de tres actos, protagonizado por una familia gitana que vive a las afueras de Sarajevo.
El filme no se deja encasillar en el docudrama, tampoco en el falso documental. Es, simplemente, un trozo de vida capturado y condensado, en algo más de una hora, por una cámara al hombro. Quien está detrás de ella no es un debutante, sino un realizador avezado en la filmación de la miseria que en 2001 ganó el Oscar a la mejor película extranjera con En tierra de nadie, cinta con la que comparte la idea de que un optimista es alguien que sabe que las cosas pueden ir mucho peor.
Tanovic llegó a esta historia a través de una noticia en prensa, mientras preparaba un largometraje, y decidió acercarse a los personajes y contar su historia con idea de que no vuelva a ocurrir algo así. Para ello tuvo que pasar unos días con ellos hasta ganarse su confianza. Nazif, el padre, trabaja desguazando coches y vendiendo las piezas; Senada, la madre, se ocupa de la casa y de las dos hijas del matrimonio. Un día la mujer siente un fuerte dolor abdominal. Al acudir al centro de salud le comunican que ha sufrido un aborto natural y que debe someterse a una intervención de urgencia o de lo contrario morirá de septicemia. Pero la operación cuesta 500 euros, una cifra exorbitante para una familia pobre sin tarjeta sanitaria.
El director huye del artificio y utiliza una estética realista, incluso sucia y destartalada, prescindiendo de música alguna, apoyado tan solo en la repetición de determinados sonidos ambientales; siguiendo a los personajes en su ir y venir mediante largos planos secuencia; sin agenda ni guión definido, con actores no profesionales pero muy naturales, la propia familia protagonista del hecho.
El resultado es compasivo y veraz. Hay denuncia, por supuesto: de la dureza del sistema, de las consecuencias de la guerra, de la marginación que sufren los gitanos; pero, sobre todo, hay respeto, dignidad, amor. Una mirada humana hacia la centralidad de la madre, el amor matrimonial, el miedo a la pérdida, la lucha por la vida, la solidaridad y la amistad.
La crítica y el público quedaron subyugados ante esta historia sencilla y terrible que nos transmite lo difícil que es vivir para los pobres. Ganó el Oso de Plata al Mejor Actor y el Gran premio del Jurado en la Berlinale. El premio no les ha cambiado la vida, pero, desde que lo ganaron, Nazif tiene trabajo y confía en que, aunque él no llegue a ver la salida de su situación precaria, sus hijas lo lograrán.
Ficha Técnica
- Dirección: Danis Tanovic,
- Guion: Danis Tanovic,
- Intérpretes: Nazif Mujic, Senada Alimanovic, Semsa Mujic, Sandra Mujic,
- Fotografía: Erol Zubcevic
- Montaje: Timur Makarevic
- Sonido: Tarik Beslija, Samir Foco
- Duración: 74 m.
- Distribuidora: Golem
- Público adecuado: +12 años
- Estreno en España: 21.2.2014
Bosnia, Eslovenia, Francia, Italia (Epizoda u zivotu beraca zeljeza), 2013.