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La sonrisa de Mona Lisa

A pesar de contar con magníficas actrices y una preciosa puesta en escena, La sonrisa de Mona Lisa falla con estrépito por el tosco guión de Rosenthal y Konner

La sonrisa de Mona Lisa: Guión, guión…

En 1953, una profesora de Historia del Arte llega a Wellesley College, una prestigiosa universidad privada cerca de Boston, sólo para mujeres, fundada en 1875, y especializada en Artes Liberales, con un Departamento de Español que fue y es referencia imprescindible a nivel mundial (allí enseñaron Salinas, Guillén, Bousoño, etc.).

La oscarizada Julia Roberts vuelve a las pantallas con una versión femenina y topiquera de El club de los poetas muertos. El veterano Mike Newell (Cuatro bodas y un funeral), realizador británico que ha trabajado sobre todo en la televisión, ha contado con un guión mediocre, poco sutil y muy mal resuelto.

La sonrisa de Mona Lisa, a pesar de contar con magníficas actrices y una preciosa puesta en escena, falla con estrépito porque el tosco guión de Rosenthal y Konner (El planeta de los simios -el remake de Burton, Mercury rising, La joya del Nilo) es maniqueo, endeble y mal armado, incapaz de administrar la intensidad de las historias personales que se cruzan (la profesora en crisis vital enfrentada a un bastión de puritanismo represor, la alumna liada con un profe, la nº 1 de la clase que sólo piensa en su prestigio social, la chica enamorada dispuesta a renunciar al prestigio universitario para ser ama de casa, la profesora lesbiana represaliada, el profe seductor).


La sonrisa de Mona Lisa

Valorar el pasado con las categorías actuales es moneda cinematográfica de uso común, que puede contentar al analfabeto e irritar -por lo general- proporcionalmente al que sabe algo o mucho del tema. No es muy convincente ni justo el retrato de una institución donde enseñó Nabokov y se han formado muchas mujeres con relevantes trayectorias profesionales, como la exsecretaria de Estado Madeleine Albright, la directora de cine Nora Ephron o la senadora Hillary Rodham.

Aunque a algunos pueda costarles asumirlo, en los años 50 muchas mujeres no entendían el matrimonio y la familia como cárceles. Otra cosa, bien distinta, es lo que piensen las mujeres universitarias, a día de hoy, sobre sus prioridades y decisiones sobre la conciliación de la vida laboral con la vida familiar. Pero en cualquier caso, no es muy inteligente aprovechar una peli de época para colocar un panfletillo «progresista» lleno de parodias que sacaría los colores a cualquier mujer con dos dedos de frente: asimilar tradición a falta de libertad es una estupidez que no merece ni media línea (más) de explicaciones.

En fin, se nota que los guionistas son hombres y que saben muy poco de enseñanza. Por lo demás, muy guapas las chicas, muy bonita la música de Portman (con canción de Elton John), muy patético el profe italiano.

Ficha Técnica

  • Fotografía: Anastas. N. Nichos
  • Montaje: Mick Audsley
  • Música: Rachel Portman
  • País: EE.UU.
  • Distribuidora: Columbia

Mona Lisa Smile, 2003

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