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Las películas de mi vida

Bertrand Tavernier ofrece en casi tres horas fragmentos de la obra de Marcel Carné, Jean Renoir, Jean-Pierre Melville o Maurice Tourneur

El poder curativo del (buen) cine

· Las películas de mi vida: Tavernier, cineasta e historiador del cine, se permite ocupar la escena, ser el protagonista y dirigir al público a un viaje cuyo recorrido no es lineal.

Las películas de mi vida es un buen título, y más viniendo de Bertrand Tavernier, pero el título original dice más, Viaje a través del cinema francés. Le pregunté si esas eran las películas de su vida y me dijo que eran unas pocas, a las tres horas de duración de esta cinta, le sigue una serie de ocho capítulos de una hora cada uno, que acaba de terminar y se emitirá en Francia dentro de unas semanas; por otra parte, estamos hablando de cine francés, hay otras películas de su vida que pertenecen a otras cinematografías, pero esa es otra historia.

Las películas de mi vida es una canción de amor; Bertrand Tavernier, cineasta e historiador del cine, se permite ocupar la escena, ser el protagonista y dirigir al público a un viaje cuyo recorrido no es lineal, sino que transcurre por las derivas de la memoria y del corazón. Comienza con su primer recuerdo de una película, una persecución de motos, recordaba las imágenes pero no sabía de qué cinta se trataba, al final logró encontrarla, era Dernier atout, de Jacques Becker. Al parecer, vio esa película convaleciente de una enfermedad y gracias a ella, y las demás que vio, se restableció rápidamente; le gusta decir que el cine le salvó la vida.

Tavernier en Las películas de mi vida (2016)

Siguen casi tres horas, que pasan volando, de secuencias maravillosas y conversaciones en las que Tavernier habla de cine con un entusiasmo y una vitalidad que contradice su edad, vemos fragmentos de la obra de Marcel Carné, Jean Renoir, Jean-Pierre Melville, Claude Sautet, Maurice Tourneur, Jacques Becker, Jean Vigo y muchos más. Tavernier cuenta lo que admira y lo que ha aprendido de cada uno de esos cineastas y de sus películas; analiza secuencias magistrales que cobran una nueva vida al verse en la pantalla grande; dialoga con los directores o cuenta sus recuerdos de ellos; habla con actores y de actores –Jean Gabin merece y recibe un trato especial-, y también de otros implicados en el cine, como compositores de bandas sonoras; recuerda a los grandes y hace descubrir a otros, a menudo injustamente olvidados, y también aquellos que solo -que no es poco- fueron buenos artesanos de serie B, serie por la que rompe una lanza.

Al término de la proyección le dije con toda sinceridad, «gracias por este regalo». Para todos aquellos que conocen esas películas y esos autores, este documental es un maravilloso recordatorio; para los que no, una inmejorable introducción que hace amar y desear conocer más y mejor el buen cine, cuyas dotes terapéuticas sigue elogiando: «también me recuperé de un cáncer mucho antes de lo que esperaban los médicos, el cine ayuda a cicatrizar».

Ficha Técnica

  • Fotografía: Jérôme Alméras, Simon Beaufils, Julien Pamart
  • Montaje: Marie Deroudille, Guy Lecorne
  • Música: Bruno Coulais
  • Duración: 190 min.
  • Público adecuado: +16 años
  • Distribuidora: Sherlock
  • Francia (Voyage à travers le cinéma français), 2016
  • Estreno: 26.5.2017
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Reseña
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Historiador y filólogo. Miembro del Círculo de Escritores Cinematográficos. Ha estudiado las relaciones entre cine y literatura. Es autor de “Introducción a Shakespeare a través del cine” y coautor de una decena de libros sobre cine.
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