Miel

Miel (Semih Ka­planoglu, 2010)

Miel: La miel, la miel, la miel…

El turco Kaplanoglu acaba su trilogía Yusuf con una película hermosa pero tan ensimismada que termina por no llegar a ningún sitio.

Yusuf es un niño retraído que vive con sus pa­dres en medio de la montaña y que acaba de em­pezar el colegio. Su padre, Yakup, es un apicul­tor que sitúa colmenas en los árbo­les para ob­tener la preciada y escasa miel de la abeja ne­gra. Un día las abejas se van y Yakup ten­drá que marcharse a colocar colmenas a otro lugar.

El afamado director turco de 47 años Semih Ka­planoglu cierra con esta cinta la trilogía que com­pletan otras dos, Huevo y Leche, que se estre­narán en España en orden inverso. El pro­tago­nista es el pequeño Yusuf. Esta historia es un re­trato de la forja de la personalidad du­rante la in­fancia, con la presencia del padre co­mo elemen­to trascendental.


Filmada en espléndidas localizaciones del no­res­te de Turquía, la película posee una calidad for­mal extraordinaria. El director lo sabe e in­sis­te, recreándose en cada uno de los detalles en el universo particular de Yusuf de una for­ma en ocasiones desmedida. El ritmo es lento, los planos sostenidos y la ausencia de músi­ca po­tencian el protagonismo del sonido ambien­te: todo propicia la contemplación del espec­tador y su inmersión en la hermosura poéti­ca de la cotidianidad. En este sentido el mon­ta­je no es demasiado coherente, con unos inser­tos oníri­cos que pueden desconcertar y casan mal con el tono general de la historia.

Argumentalmente, la relación de admiración en­tre el hijo autista y el enigmático padre resul­ta entrañable pero incongruente. Nunca es fá­­cil que el papel protagonista de una película tan detallista lo aguante bien un niño pero, en este punto, resulta magnífica tanto la interpretación de Bora Altas como el mimo que pone Ka­pla­noglu en la dirección de actores. La compara­ción con películas magistrales como la italiana El árbol de los zuecos (1978) o la iraní El color del paraíso (1999) es muy oportuna porque son cintas claramente emparentadas. Y así, aun­que interesante y hermosa, Miel es una cinta demasiado larga, con unas incoherencias ar­gumentales y un exceso de lirismo que termina por no trascender más allá de un ejercicio de in­troversión. Ganó el Oso de Oro en Berlín.

Nacho Á. O’Dogherty

Ficha Técnica

  • Fotografía: Baris Özbiçer
  • Montaje: S. Kaplanoglu, Ayhan Ergürsel
  • País: Turquía/Alemania
  • Duración: 103 m.
  • Público adecuado: +16 años
  • Distribuidora: Golem
  • Estreno: 28.1.2011

BAL, 2010

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