No estoy hecho para ser amado: Un tango a solas
El segundo largometraje del francés Stephane Brizé (Le bleu des villes, 1999) obtuvo 3 nominaciones a los premios Cesar en 2005 -mejor actor, mejor actriz y mejor actor secundario-, en una edición donde el gran triunfador fue Jacques Audiard y su De latir mi corazón se ha parado.
Un dato significativo en una película que difícilmente se sostendría sin unas buenas interpretaciones. Como todos los filmes, por otro lado, pero más si tenemos en cuenta que esta es una cinta formalmente sobria, construida más sobre los silencios de los protagonistas que sobre sus diálogos.
El tango parece, en realidad, una excusa para mostrarnos la existencia gris marengo de los personajes y la oportunidad para que surja el amor entre los dos protagonistas. Nos situamos en ese existencialismo tan francés, donde al final lo único que triunfa es el amor, ese en que no importan la edad o las circunstancias.
La incomunicación entre padres e hijos, el egoísmo en las relaciones de pareja, la soledad, las dificultades económicas, en fin, ese lado tan chungo de la existencia se pone en la coctelera y se agita a ritmo de tango y ya tienen la fórmula de este No estoy hecho para ser amado.
La factura es interesante, Brizé apuesta por un aspecto de cine experimental que eleva la cinta bastante por encima de la media que hemos podido apreciar en filmes recientes relacionados con el baile, como ¿Bailamos? o Déjate llevar.
Como suele ser habitual en este tipo de películas «pequeñas», la edición en DVD únicamente aporta varias fichas técnicas, filmografía y el trailer para las salas de cine.
Ficha Técnica
- Dirección: Stéphane Brizé,
- Guion: Stéphane Brizé, Juliette Sales,
- Intérpretes: Anne Consigny, Patrick Chesnais, Lionel Abelanski, Georges Wilson, Cyril Couton,
- Fotografía: Claude Garnier
- Montaje: Anne Klotz
- Música: Christophe Muller, Eduardo Makaroff
- Duración: 92 min.
- Público adecuado: +18 años
- Distribuidora: Alta
- Francia (Je ne suis pas là pour être aimé), 2005
- Estreno: 16.6.2006