Simbad, la leyenda de los siete mares

Simbad, la leyenda de los siete mares: Aventura mediterránea

DreamWorks acude a la cita veraniega con una propuesta cinematográfica acuática y refrescante: Simbad, la leyenda de los siete mares. Bajo la dirección del debutante Patrick Gilmore y Tim Johnson (Hormigaz), y con guión de John Logan (Gladiator, RKO 281), la productora de Spielberg ha construido un complejo universo de fantasía para contar la historia de un bravucón que se verá involucrado en una aventura de proporciones míticas para salvar la vida de su mejor amigo. Siracusa, en mitad de un Mediterráneo mítico, es el punto de reencuentro de dos amigos de la infancia: Simbad, un pirata divertido y aventurero, y Proteo, un honesto príncipe, prometido con la bella Marina, embajadora de un pueblo vecino. Una noche, la malvada Eris, diosa de la discordia, roba de Siracusa el valioso Libro de la Paz, que mantiene el orden en el mundo.

En una apuesta arriesgada, el estudio ha decidido fusionar la animación en 2D y 3D con resultados tan espectaculares como desiguales. El despliegue de imaginación empleado en Tártaro, el reino de Eris, o la soberbia escena de las sirenas destacan por su fluidez, brillantez y limpieza en la fusión de ambas técnicas. No obstante, hay otras tantas que sobresalen con valores opuestos: la integración del ordenador y del lápiz desentona y saca al espectador de la acción con imágenes que se asemejan al universo Pokemon (lucha contra el pájaro Roc). Sorprende también la desigualdad en los movimientos de los personajes: en algunas secuencias la planificación es milimétrica, en otras, los personajes se vuelven torpes y primarios.

La banda sonora de tintes épicos, a cargo del responsable de Shrek y Hormigaz, realza la fuerza y fluidez narrativas de la historia basada en Las mil y una noches, que resulta un buen entretenimiento para toda la familia, mucho más sugestivo que el nada afortunado cartel promocional. Dos actores de la serie Un paso adelante sustituyen a Brad Pitt, Catherine Zeta-Jones y Michelle Pfeiffer.