Soy Nevenka: Lucha por la dignidad
· Crítica de Soy Nevenka | Estreno 27 de septiembre de 2024.
· Mireia Oriol plasma a la perfección el carácter tierno y frágil de una primeriza joven, que desciende a los infiernos, que debe sufrir la incomprensión de su familia y de los de su alrededor.
En el año 2000, la joven Nevenka Fernández (24 años), concejala de Hacienda en el ayuntamiento de Ponferrada, mantiene una relación extremadamente tóxica con el alcalde del PP, Ismael Álvarez, que abusa de ella y no la deja actuar con libertad. Nevenka ha entrado en política gracias a él, y se debate internamente entre la admiración que le tiene como político y la animadversión que crece a pasos forzados, al sentirse atacada en su dignidad como mujer.
Esta historia conmovió profundamente a la sociedad en su momento. Fue el primer caso de acoso sexual que saltaba a la esfera pública en el mundo de la política. Y acaparó portadas en los medios de comunicación, cuando el PP acababa de obtener la mayoría absoluta. 20 años después, en 2021, se grabó una docuserie de tres capítulos, donde Nevenka rompió su silencio y contó su historia, en primera persona.
Tres años después, Icíar Bollaín acepta el encargo de ficcionar esta historia, inspirándose en el libro Hay algo que no es como me dicen: el caso de Nevenka Fernández contra la realidad, de Juan José Millás. Y está preparada para ello. Con mucho bagaje cinematográfico e interés por los temas sociales y de la mujer, ya en 2003 trató el tema del acoso en la multipremiada Te doy mis ojos y, posteriormente, plasmó una historia real de trasfondo político: Maixabel (2021).
Ahora, elige esta propuesta con un objetivo claro: aportar matices que un documental no puede conseguir. Esos matices pertinentes que plasman el viaje emocional de la rotura de la protagonista: el paso de la Nevenka pre-acoso a la Nevenka post-acoso. La película pretende conseguir la empatía del público, en ese viaje en busca de su dignidad. Y lo consigue.
Lo consigue, en primer lugar, por la grandísima interpretación de los dos protagonistas. Mireia Oriol plasma a la perfección el carácter tierno y frágil de una primeriza joven, que desciende a los infiernos, que debe sufrir la incomprensión de su familia y de los de su alrededor, pero que luego es capaz de resurgir de las cenizas y acudir a los tribunales. A su vez, Urko Olazabal (que ya trabajó con Bollaín en Maixabel, en el papel del etarra Luis Carrasco y por el que ganó el Goya al mejor actor secundario) sabe darle la réplica adecuada en su papel de macho maltratador, reverenciado y adorado -sin embargo- por su equipo y la gente de su pueblo.
La dirección artística se alinea para apoyar este viaje emocional. A medida que Nevenka se desequilibra, la planificación hace lo mismo. La cámara se va torciendo con ella y todo se va oscureciendo. Además, la labor de maquillaje y vestuario subrayan este itinerario de degradación y desolación. La música de Xavi Font acompaña a la perfección. Y cabe destacar el tema de la canción Cuando nadie ve, compuesta exprofeso por el dúo vigués Fillas de Cassandra y que acompaña los títulos de crédito.
Bollaín se esfuerza por tratar la historia con rigor, y no dejarse llevar por escores ideológicos. Es marca de la casa. Pero la crítica tiene opiniones diversas y es fácil aprovecharse de esta historia para agitar el cóctel mediático. Soy Nevenka fue presentada en la sección oficial de la pasada edición del Festival de Cine de San Sebastián. Y, como comentó la propia directora en la rueda de prensa, es una pena que un tema como este, que debería ser de Estado, se use como arma política.
Ficha Técnica
- Dirección: Icíar Bollaín,
- Guion: Icíar Bollaín, Isa Campo, bollain,
- Intérpretes: Ricardo Gómez, Mireia Oriol, Urko Olazabal, Carlos Serrano, Lucía Veiga, Luis Moreno,
- Fotografía: Gris Jordana
- Música: Xavi Font
- Duración: 110 min.
- Público adecuado: +18 años (X)
- Distribuidora: Buenavista
- España, 2024
- Estreno: 27.9.2024