The First Monday in May

The First Monday in May: La fiesta de la moda en el Met

· The First Monday in May se ha construido en torno a Anna Wintour, directora de la revista Vogue, que Meryl Streep caricaturizó en El diablo viste de Prada.

Cada primer lunes de mayo en el Metropolitan Museum de Nueva York se produce una fabulosa gala de apertura, la Met Gala, que constituye la mayor fiesta del año en el mundo de la moda. El documentalista Andrew Rossi dedica su película a la gala de 2015, llamada «China a través del espejo», que exponía moda inspirada en la cultura del gigante asiático. La película comienza con un rápido montaje de la alfombra roja que aquella jornada pisaron famosos como Rihanna, George Clooney, Michael Bloomberg, Madonna, Lady Gaga, Jennifer Lawrence, Anne Hathaway, John Galliano, Justin Bieber, Bradley Cooper, Naomi Campbell y muchos  más. Después Rossi plantea la gran pregunta: ¿La moda, la alta costura, es arte? Cada imagen de su documental responde a esa pregunta, aunque las personalidades que aparecen den opiniones más matizadas.

The First Monday in May se ha construido en torno a Anna Wintour, directora de la revista Vogue, que Meryl Streep caricaturizó en El diablo viste de Prada; encargada de la exposición, supervisa su trabajo de organización del evento Andrew Bolton, conservador del «Instituto del Vestido» del museo. Wong Kar-Wai fue contratado en calidad de director artístico. A lo largo de la cinta vemos los diversos intereses que confluyen/chocan en la organización de la exposición y de la gala, reuniones, comentarios, invitados, diseños… Rossi dedica el mismo metraje a la organización de la gala de apertura que a la organización de la exposición, lo que constituye de por sí una declaración de principios: los famosos no solo pagan por la exclusiva, sino son la mejor promoción que se puede desear. La imagen de Rihanna en la alfombra roja con un vestido amarillo que pesa más que ella y arrastra una cola de tres metros resulta inolvidable. Ese vestido pertenece a la exposición, se tardó dos años en confeccionarlo y será exhibido en una vitrina; se creó para ser visto y admirado, no para ser llevado.

Andrew Rossi lleva al gran público un debate académico y realiza un documental interesantísimo y de gran belleza.