Transsiberian

Este “intento” de thriller cruza demasiados géneros y se pierde en una historia caótica y unos personajes carentes de interés

Transsiberian (2008)

Transsiberian: Viaje a ninguna parte

Transsiberian | En un tren transiberiano que viaja de Pekín a Moscú coinciden dos parejas con problemas conyugales: Roy y Jessie (Woody Harrelson y Emily Mortimer), y Carlos y Abby (Eduardo Noriega y Kate Mara). A mitad de viaje, estos cuatro personajes se verán involucrados en un caso de narcotráfico y en una atracción fatal entre Carlos y Jessie.

No sé muy bien adonde habrá querido llegar con este viaje Brad Anderson (Connecticut, 1964), pero el resultado es desastroso. La película intenta mezclar diálogos de película intelectual europea con un personaje que parece recién salido de Fargo (Harrelson), otro extraído de Historias del Kronen (Noriega), y dos chicas que están entre Rompiendo las olas (Mortimer) y Reality Bites (Mara). Por si fuera poco, Anderson le añade al cocktail una aburridísima intriga policíaca con un perverso policía ruso (Kingsley), algunas consideraciones metafísicas de un pastor protestante y una escena brutal estilo La matanza de Texas para cerrar la película.

Anderson no consigue que su película funcione en ninguno de sus múltiples registros a pesar de contar con buenos actores. Y lamentable la elección de Noriega: enésima vez que un español acepta entrar en Hollywood con un papel de macho latino «supersalido».

Ficha Técnica

  • Fotografía: Xavi Giménez
  • Montaje: Jaume Martí
  • Música: Alfonso Villalonga
  • Duración: 111 min.
  • Público adecuado: +18 años
  • Distribuidora: Filmax
  • Reino Unido, Alemania, España, 2008
  • Estreno: 24.10.2008
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