Tú eres el siguiente

Tú eres el siguiente: Poca novedad en el frente

Tú eres el siguiente | La ecuación mil veces vista: grupo + casa con dos pisos y sótano + noche + matanza + asesinos con máscara.

Lo cómodo en una película como ésta, sería usar palabros en inglés y matizarlos con adjetivos mal usados como bizarro, todo para dar la impresión de naturalidad y desparpajo al abordar una cosita descerebrada hecha con dos duros que repite una ecuación mil veces vista: grupo + casa con dos pisos y sotano + noche + matanza + asesinos con máscara.

- Anuncio -

Se dan cita los hachazos, ballestas, machetes, destornilladores, licuadoras, menaje de cocina y demás hallazgos casqueriles bajo el paraguas de «es sólo una película, relájate y grita agusto». Sí.  Es solo una película, tonta y banal hasta decir basta, que se cuelga de una excusa mínima para reunir a unos personajes en una casa y montar una carnicería, con mucha gente que muere de maneras repulsivas, con sangre y vísceras por todas partes.

Pretender que Tú eres el siguiente en una pequeña joya del género o del subgénero «aquí estamos masacrando peña» me parece excesivo. Es una películilla en la que la que todo vale para batir el record de muertes violentas y repulsivas, con el conocido sistema del joven guionista norteamericano formado en el paradigma del «¿y si…?». Ciertamente la actriz protagonista no está mal y hay dos bromas relativamente divertidas y un par de diálogos ingeniosos. El resto, más allá de la sustitución de los adolescentes por una familia con hijos mayores, es uno de tantos despropósitos sanguinolentos.