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Una noche en el viejo México

Emilio Aragón se pasa al western con esta historia ya vista muy bien interpretada por Robert Duvall

Una noche en el viejo México (2013)

Una noche en el viejo México: El abuelo y su nieto

Un vaquero anciano expulsado de su casa, que es lo único que le queda, emprende un viaje-huida a México con un nieto veinteañero al que acaba de conocer y una stripper que sueña con cambiar de vida.

Después de Pájaros de papel, Emilio Aragón vuelve al largometraje con una especie de western crepuscular que tiene a favor un enorme protagonista –Robert Duvall– y en contra una también enorme inercia.

Estamos ante una producción cuidada, buena fotografía, puesta en escena, buena banda sonora, pero la historia es tan trillada que cualquier espectador podría ir recitando los puntos de giro unos minutos antes de verlos en la pantalla. Todo: los personajes, los conflictos y hasta los escenarios -la frontera, la cantina y el burdel– son previsibles. Y esa falta de novedad hace que, hasta lo que debería emocionar -la difícil relación del anciano con su nieto- deja frío. O casi… Porque hay algo que da calor y fuerza a una película que, si no, pasaría de puntillas por la cartelera. Más que algo es alguien. Un Robert Duvall que resume y condensa en su interpretación todo lo que de buen cine tiene la película.


¿Salva Una noche en el viejo México? No diría yo tanto, pero sí que su aparición hace que se nos olvide que la historia, los escenarios y los tiroteos ya los habíamos visto antes. Y a Duvall interpretando al personaje también. Pero de los clásicos uno nunca se cansa.

Ficha Técnica

  • Fotografía: David Omedes
  • Montaje: José Salcedo
  • Música: Emilio Aragón
  • Duración: 103 min.
  • Público adecuado: +16 años (VS)
  • Distribuidora: Hackenbush
  • EE.UU. (A Night in Old Mexico), 2013
  • Estreno: 9.5.2014
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