Wonder: Cine demostrativo
· El director, quizás porque la autora del libro es productora ejecutiva, ha optado por una fidelidad al original que impide que Wonder fluya.
El ruido en la comunicación, la chatarra lingüística, la condición premiosa de un relato que debería fluir como el agua por una torrentera pina… Es lo que me viene a la cabeza cuando escribo sobre Wonder, adaptación al cine del libro homónimo de la escritora neoyorquina R. J. Palacio (Raquel Jaramillo Palacio, Queens, 1963), que antes había ejercido bastantes años como ilustradora.
August Pullman, un niño de 10 años, va a empezar a ir a la escuela. Hasta ese momento no lo ha hecho porque nació con severos problemas que incluyen malformaciones faciales que han obligado a operarle muchas veces. Hasta ese momento es su madre la que se ocupa de su educación en casa.
Stephen Chbosky, 47 años, dirige su tercer largo, precedido por Las ventajas de ser un marginado, en el que fue también guionista, versionando su propia novela. En Wonder adapta con dos colegas una novela infanto-juvenil ajena, que tiene seis narradores (el propio August, dos amigos de su edad, su hermana adolescente Via, Justin -noviete de Via– y Miranda -amiga de Via-), y se entrega de lleno al perspectivismo didáctico y, por lo tanto, demostrativo.
Decía mi amada Flannery O’Connor en una carta a una amiga, con esa mala leche tan propia de escritores cuando hablan de colegas coetáneos, que Matar a un ruiseñor era una novela infantil. Y en cierto modo, lo es. No es menos cierto que la novela de Lee es infinitamente mejor que la novela que Flannery intentó, Sangre sabia, un verdadero desastre, especialmente si la comparamos con algunos de sus relatos y ensayos, que son verdaderamente prodigiosos.
La novela de Palacio tiene poco que ver con autoras de la categoría de O’Connor o Lee. Me parece un relato apañado, estratégicamente diseñado para ir tañendo las cuerdas sensibles de los nenes y las nenas.
Me he detenido en la novela porque el director, quizás porque la autora del libro es productora ejecutiva de la película, ha optado por una fidelidad al original que impide que la cinta fluya. Tediosa y reiterativa, la sensiblería del libro se multiplica por tres, de forma que por muy buena actriz que sea la Roberts (más guapa que nunca, por cierto), por excelente que resulte el trabajo de Owen Wilson (nuevamente es un padre muy convincente), por chisposo que sea el pequeño que nos asombró en la estremecedora Room… decía que a pesar de los buenos actores y una realización más que correcta, la película es un muermo paquidermo. Al libro le sobran 100 páginas, a la película 40 minutos. Evidentemente, la repetición siempre ha sido parte integrante del lenguaje fílmico desde su nacimiento, pero hay películas en las que, a uno, después de decir por lo bajo “no, por favor, otra vez no”, le dan ganas de pulsar un botón para eyectarse.
Ficha Técnica
- Dirección: Stephen Chbosky,
- Guion: Stephen Chbosky, Steve Conrad, Jack Thorne,
- Intérpretes: Julia Roberts, Owen Wilson, Jacob Tremblay, Mandy Patinkin, Sonia Braga, Daveed Diggs, Millie Davis, Izabela Vidovic,
- Fotografía: Don Burgess
- Montaje: Mark Livolsi
- Música: Marcelo Zarvos
- Duración: 113 min.
- Público adecuado: +7 años
- Distribuidora: eOne
- EE.UU., 2017
- Estreno: 1.12.2017