Asesinato en el fin del mundo

Asesinato en el fin del mundo: Talento detectivesco

Asesinato en el fin del mundo | Esta inquietante serie arranca con una sesión de lectura en una librería en la que la joven autora, Darby Hart, narra cómo ella y su novio Bill descubrieron a un asesino en serie. Fue su primera investigación criminal. Han pasado años y la fama de Darby como investigadora amateur ha crecido. La acción se desplaza ahora a Islandia, a un sofisticado hotel donde Darby y un grupo muy selecto de talentos han sido invitados por Andy Ronson, magnate de la tecnología, para pasar unos días estudiando un proyecto que podría salvar el planeta. Entre los invitados se encuentra también Bill, de quien Darby se distanció poco después de concluir el caso narrado en su libro. La noche de su llegada Bill falleció y, contra la opinión de todo el mundo, Darby piensa que fue asesinado.

Asesinato en el fin del mundo tiene leves elementos de ciencia ficción, en la línea de los creadores de la serie The OA, que les sirven para plantear una serie de preguntas de actualidad acerca de la contaminación, el cambio climático, las soluciones que puede aportar la tecnología y el peligro que puede suponer la integración de la inteligencia artificial a la vida cotidiana. Con todo ese brillante envoltorio y una ambientación futurista, se trata de un thriller convencional en el que un investigador (investigadora) tiene que resolver un asesinato.

La serie comienza como una novela muy negra, al dramatizar la primera aventura de Darby. Una serie de flashes back (ahora se dice analepsis) completarán el relato de aquella investigación y la historia de la pareja. Darby, hija de un médico forense viudo, pasó su infancia y adolescencia acompañando a su padre a escenas de crímenes y a realizar autopsias. Conoció a Bill a través de la red, investigando un asesinato. Ambos tenían talento de hacker. También sabremos por qué se separaron y la ulterior vida de Bill como artista y militante ecologista. Todos esos detalles son más interesantes que la actual investigación, lastrada más que ilustrada por los ocho genios -bastante erráticos- invitados al hotel esos días.

La puesta en escena de Asesinato en el fin del mundo es impresionante y el elenco de actores es formidable: Emma Corrin, Clive Owen, Brit Marling, Harris Dickinson, Alice Braga; ellos mantienen el interés del espectador, pero se tiene la impresión todo el tiempo de que hay mucho talento malgastado y de que Zal Batmanglij y Brit Marling sufrieron un bloqueo creativo y cosieron la trama con clavos, jugando a sorprender al espectador y sacar conejos del sombrero. Además, a Darby Hart le falta carisma y encanto, con todo su talento detectivesco es una joven antipática, egoísta, con la que resulta difícil empatizar.