El libro de Boba Fett

El libro de Boba Fett: Las andanzas de un pirata

Acerca de El libro de Boba Fett se puede escribier mucho, muchísimo; pero creo que es mejor no extenderse demasiado ya que se trata de Jon Favreau continuando la historia que comenzó hace unos años con The Mandalorian. El guion no está mal -aunque es más discutible que el anterior-. Fundamentalmente consigue lo que el público quiere: la sensación de estar de verdad en el universo Star Wars de George Lucas, y no en un pastiche que se le parece.

Boba Fett fue un misterioso secundario, un cazarrecompensas, que aparece escasos momentos en la trilogía original de Lucas. Se le volvió a ver en El ataque de los clones, y hacia el final de la segunda temporada de The Mandalorian. A lo largo de los años consiguió una popularidad insospechada -así es el público-, y Jon Favreau le ha encontrado un lugar, en Tatooine. De manera canónica el viejo pirata aspira a retirarse como un rey y reclama el imperio de Jabba el Hutt. Poco a poco vemos cómo se forma un propósito que conduce a una guerra -entre mafias- por el control del planeta de Luke Skywalker. La trama avanza en dos direcciones. Arranca con El retorno del Jedi, cuando Boba Fett cayó en el pozo, en el desierto, y Jabba el Hutt también murió. Lo vemos recuperándose de sus heridas en una cámara llena de líquido, soñando -recordando- su pasado. Descubriremos quién era ese hombre y el por qué de sus actos, a la vez que la acción avanza en dirección a su coronación.

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Como en las series anteriores Favreau es el hombre orquesta, aunque prefiere que cada capítulo sea dirigido por una persona diferente. Él se reserva un capítulo y otros seis directores se encargan del resto. Melodías nuevas incorporan los acordes que Ludwig Goransson compuso para The Mandalorian.

La historia no tiene el atractivo de sus predecesores, es menos original. Ahora bien, es entretenida, tiene dos protagonistas principales carismáticos, y eso basta. El libro de Boba Fett cumple sus objetivos; lleva a los fans por un bello recorrido lleno de lugares y personajes conocidos, especialmente en el último tramo, cuando volvemos a ver a Mando -y a un montón de caras que habíamos echardo de menos-; seguiremos sin ver a Gina Carano, que tendría cabida de sobra -y de qué manera- en el final apoteósico que se anuncia. Mandalorian, no hay versión castellana.