La historia de Lisey

La historia de Lisey: Nueva e interesante historia de la factoría King

Han pasado dos años desde la muerte del célebre escritor Scott Landon y Lisey, su mujer, todavía no se ha de­cidido a entregar el archivo Landon a la Universidad, co­mo estaba previsto. Mientras ordena el ático donde Scott trabajaba, Lisey recibe amenazas de un chiflado fan de los libros de su marido. Para colmo de males en ese momento su hermana mayor, Amanda, mentalmente ines­table, cae en un estado catatónico. Todo ello despierta en Lisey una serie de inquietantes recuerdos de Scott que durante años había conseguido reprimir. Tal es el arranque de la novela y del primer capítulo de la mi­ni­serie de Apple TV+ que se basa en ella. A partir de ese mo­mento tanto el libro como la serie van a desarrollar tres líneas de acción: la historia de Lisey y Scott, la his­to­ria de Lisey y sus hermanas –Amanda y Darla, en la no­vela aparecen dos hermanas más-, la historia de Lisey y el chiflado fanático acosador. Una continua serie de fla­shes-back, organizados como tales ya en la novela, cuen­tan la siniestra historia de Scott y su familia tal co­mo Scott se la había contado, la locura y “mal rollo” que tenía la sangre de los Landon y el mundo imaginario “Boo’ya Moon” en el que él y su hermano se refugiaban pa­ra sobrevivir a los malos tratos de su padre.

La historia de Lisey fue publicado en 2006 y es una de las mejores novelas de Stephen King. Éste en su mo­mento declaró que no dejaría que nadie la llevara al cine y, en tono humorístico, solo él tenía derecho a es­tropearla. King, que sabe bastante de adaptaciones literarias a las pantallas grande y pequeña, considera que las novelas que mejor funcionan en el cine son las más cortas y sencillas. Un libro como La historia de Lisey, complejo y con diversas subtramas, necesita mucho tiem­po para desarrollarse bien. La miniserie de Apple TV+, en ocho capítulos de 50 minutos, le da el tiempo que necesita y, como dice el propio escritor, basta con de­jar un pequeño elemento al final que enganche con el ca­pítulo siguiente.

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Stephen King es productor y guionista y ha estado to­do el tiempo en el plató con el director, el chileno Pablo Larraín, especialista en historias violentas, aun­que también dirigió la notable Jackie. El resultado es bastan­te bueno, los incondicionales de la obra de Ste­phen King, especialmente los que hayan leído la novela ori­ginal, no se sentirán defraudados. King ha seguido fiel­mente el texto original, si acaso ha desarrollado algún elemento del libro. Los que no conocen la novela en­contrarán temas recurrentes en la obra de King: la en­fermedad mental; el mundo de real y el mundo de ficción creado por un paranoico, los límites de la realidad, un acosador despiadado.

El suspense -terror hay poco- prin­cipal viene de la in­quietante historia que se desarrolla poco a poco, que Li­sey va contanto/recordando, con parsimonia y que tie­ne relación con su acosador actual. El relato va a más, arran­ca con un par de sorpresas fuer­tes, pero luego son los protagonistas -la serie tiene unos intérpretes excelentes-, quienes mantienen el interés del espectador. Joan Allen hace un retrato sen­sible de la paranóica Aman­da, Dane DeHaan del lu­ná­tico acosador, mientras que Clive Owen y Julianne Moo­re dan vida a la pareja protagonista.

La historia de Lisey es una historia de amor que contiene elementos de locura que Stephen King convierte en una realidad siniestra. 

Pequeña nota

Stephen King publicó su primera novela, Carrie, en 1974, fue un éxito inmediato y fue llevada al cine casi so­bre la marcha, en 1976, por Brian De Palma. Grandes pe­lículas de su obra han sido además El resplandor, de Stan­ley Kubrick (1980), Cuenta conmigo, de Rob Rei­ner (1986), Cadena perpetua, de Frank Darabont (1994), y Misery (1991), también de Reiner. Además han sido muy populares docenas de otras como Cujo, It, Sue­ños de fuga o Secret Window. En los últimos tiempos se han realizado diversos remakes de películas anteriores, y miniseries de televisión.

Jennifer Jason Leigh, que encarna a Darla, hermana de Lisey, apareció en Misery.

Stephen King tiene más de trescientas obras en el ci­ne, varias decenas son cortometrajes. Él mismo ha producido muchas de ellas, sobre todo para televisión, y di­rigió en 1986 La rebelión de las máquinas.

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