Magnum P.I.

Magnum P.I.: Tuneando los ochenta

· Los episodios de Magnum P.I. se inspiran en los antiguos en el estilo y, en parte también, en la forma: el recurso a flash backs de la guerra, la voz en off de Magnum narrador de sus propias aventuras dirigiéndose al público, etc.

Para el público más joven hay que comenzar diciendo que Magnum fue una serie de televisión de los ochenta, que contaba las aventuras de Thomas Magnum, veterano de Vietnam, convertido en detective privado e instalado en Hawai tras licenciarse del ejército; conviene comentar también que su protagonista, Tom Selleck, tenía un gran carisma y obtuvo un fenomenal éxito. En la nueva serie Thomas Magnum, veterano de Afganistán, se recicla como detective privado en Hawai; como el original, se instala en la mansión de su amigo Robin Masters, escritor millonario, y utiliza su flamante Ferrari rojo en sus correrías por la isla. También administra la finca J. Higgins, pero en este caso Jonathan se ha convertido en Juliet, británica, y exagente del MI 6; y también le echan una mano un par de compañeros de armas que han venido a Hawai con él.

La puesta al día de Magnum –cuando se trata de una serie lo llaman reboot (reinicio), no remake- viene, principalmente, de la mano de Eric Guggenheim y Peter M. Lenkov, responsables también de las nuevas versiones de Hawai 5.0 y de McGyver.

Los episodios se inspiran en los antiguos en el estilo y, en parte también, en la forma: el recurso a flash backs de la guerra, la voz en off de Magnum narrador de sus propias aventuras dirigiéndose al público, a menudo con humor, y sobre todo en la total dependencia de la serie en el encanto de su protagonista; Jay Hernandez da la talla, aunque los guionistas tardan en definir al personaje: para empatizar con el protagonista hay que saber más de él, interesarse por él; del Magnum de 1980 sabíamos todo, empezando por el nombre completo Thomas Sullivan Magnum IV; los primeros capítulos no dicen gran cosa sobre Thomas Magnum, se limitan a ofrecer mucha acción -impecable, por cierto-, con un ritmo endiablado. Poco a poco va llegando la información y, no por casualidad, las historias mejoran. De las once que han sido emitidas hasta la fecha, las mejores son las cuatro últimas.

En definitiva, un aceptable reboot, amable, entretenido y bien actualizado. Los productores han apostado por el nombre y el encanto de los ochenta -una vez más-, pero le falta algo de carisma personal.