Ojo de Halcón

Ojo de Halcón: Veteranía y juventud

Un espectacular prólogo muestra parte de la gran batalla que Los Vengadores mantuvieron contra alienígenas en 2012. Una niña, Kate Bishop, observa la batalla al tiempo que intenta no perecer en la misma. Lo mejor fue que Ojo de Halcón le salvó la vida con una flecha explosiva. Al final de la contienda Kate y su madre sobrevivieron, su padre no. Mientras la lleva a un lugar seguro, su madre le pregunta “¿qué quieres?”. “Un arco”, responde la niña.

Han pasado diez años. Kate Bishop es una adolescente rebelde que se ha dedicado a admirar e imitar a Clint Barton: buena cabeza, artes marciales y arquería. La historia comienza cuando vuelve a casa por Navidad, en realidad porque la han vuelto a expulsar del colegio. Y en Nueva York coincide con Clint Barton, vengador jubilado, que ha acudido a Broadway con su familia, esposa e hijos, a ver un musical titulado Capitán América (Rogers: The Musical). En el entreacto se le escapa el comentario “Thanos tenía razón”.

La serie consiste en juntar a este vengador jubilado -Cervantes hablaba de soldados viejos y estropeados- y a su joven y cabezota admiradora y ver qué pasa: saltan chispas. Hay un delicioso salto generacional, hay veteranía frente a juventud, hay una figura paterna, hay un profundo sentido ético y muchas cosas más… nada del otro mundo, pero cada pieza está en su sitio y no hace falta más, el talento de los dos protagonistas principales, entre los que hay una auténtica química, hace el resto.

La trama de fondo es la próxima boda de la madre de Kate: Eleanor Bishop va a casarse con Jack Duquesne. Ambos son millonarios pero parece que hay algo turbio en las empresas Duquesne. Kate arremete contra el novio de su madre, Clint evita que maten a esa joven, envía su familia a casa y promete que llegará a tiempo para celebrar la Navidad con ellos.

Ojo de Halcón tiene mucho humor, rozando la parodia en diversas ocasiones. También tiene mucha acción, excelente en su mayoría, forzada en alguna ocasión. En general es una buena historia, más compleja de lo que parece al inicio, que va abriendo nuevas ideas y posibilidades para desarrollos futuros.

Está claro que los no iniciados al Universo Marvel no van a entender muchos de los guiños y alusiones que tiene esta serie, tampoco serán muchos, ni tampoco es tan importante. El espectáculo es seguir a la pareja Renner–Hailee Steinfeld, y apreciar la contribución de dos estrellas del nivel de Vera Farmiga (madre de Kate) y Tony Dalton (Jack Duquesne) como secundarios de lujo.