Festival de Cannes 2015. Round 1. Aterrizaje
Festival Cannes 2015 | Fernando Hdez. Barral, enviado especial de FILA SIETE, aterriza en Cannes y se abre paso… Su primera crónica nos sitúa ambientalmente, mientras él mismo se ubica.
El maestro de ceremonias y la mayonesa
Llegamos al festival de festivales dispuestos a darlo todo; una semana por delante para ver filmes de los mejores cineastas. Hablaremos en otro momento de ellos.
Cannes es el mayor evento del cine mundial. Algunos dicen que se parece a un circo, en tal caso uno de cuatro pistas.
Por otro lado en la segunda pista del Circo cientos de directores presentan sus filmes, algunos su primera cinta. Vienen llenos de ganas de dar la campanada y normalmente lo consiguen. Llegar a La Croissete es un triunfo. Para otros, en cambio, el show de prestidigitador se ha agotado. Hemos charlado hoy con un director americano, off the record nos ha reconocido que ha venido a Cannes a presentar su last picture. Detectamos en su voz algo de miedo. Realmente, nos confiesa, si no triunfa lo deja.
En el mercado hay de todo. Nicolas Cage convive con Haneke, un luchador de wrestling comparte espacio con el cine de Philipe Garrel. Es como entrar en un restaurante donde puedes pedir lo que quieras, comida con estrella Michelin y fast food grasiento. Pero es el mismo restaurante.
La cuarta pista del Circo es la nuestra. En ella nos sentimos a gusto, en casa. En la rueda de prensa de hoy lo comentaba un emocionado Jake Gyllenhaal, alucinando con el privilegio de ser jurado. Ves la peli antes que nadie, ha dicho el protagonista de Nightcrawler. Cáspita, Jake, qué bien eliges las pelis y que gran verdad has dicho. Gyllenhaal ha dado en el clavo.
Al final se trata de volver a ser un espectador ilusionado. La tarea se antoja ardua, el futuro incierto.
En Cannes se ve por primera vez aquello que durante el resto del curso colma los cines de todo el planeta. El tipo puede ser discutido pero tiene buen gusto. No tener fe en Thierry puede destruirte, no conviene dudar.
No te preocupes por las manchas de mayonesa. Ya lo dijo Sam Jackson en Pulp Fiction, los franceses le ponen salsa mayo a todos sus platos. Si algo hay algo tan seguro en Cannes como el buen cine, es que vas a mancharte de mayonesa.