Chacal

Chacal: Interesante thriller político

Chacal | Edward Fox interpreta un per­sonaje elegante, frío y despiada­do, que actúa de forma solitaria y pul­cra, sin dejar huella ni cabo suelto.

Interesante thriller político, con es­tética documental, sobre el complot de la organización clandestina OAS para acabar con la vida del presidente de Francia Charles de Gaulle. Adap­tación fiel de la novela homóni­ma de Frederick Forsyth centrada en el personaje del asesino a sueldo, de nombre en clave “Chacal”, protagonizado por un entonces desconoci­do Edward Fox, que interpreta un per­sonaje elegante, frío y despiada­do, que actúa de forma solitaria y pul­cra, sin dejar huella ni cabo suelto.

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Zinnemann tuvo el acierto de cen­trar el núcleo del suspense no tan­to en el magnicidio, cuya resolución de antemano se vislumbra, sino en los preparativos y los tropiezos que encuentra, encadenados a través de un inteligente guión y un soberbio montaje -mereció una nominación al Oscar, finalmente arrebatado por El golpe– que desplaza la pregun­ta de cómo se producirá el atenta­do a donde fallará Chacal.

Muy unido a esto, una focalización om­nisciente que permite armar el puz­le y anticiparse a los sucesos, pe­ro que mira sobre todo a través de dos “lentes”: la del sicario que tiene que llevar a cabo su trabajo y la del po­licía encargado de impedirlo.

Este re­curso engañoso del director obli­ga al espectador a elegir cons­tan­te­men­te entre la destreza y sangre fría del ase­sino y la sagacidad del investigador policial -magnífico Michael Lons­dale– acompañado de su ayu­dante, un joven Derek Jacobi. A me­dida que el final se acerca y se es­tre­cha el cerco sobre Chacal, la ten­sión alcanza su cota máxima acom­pañada de una oportuna música incidental.

La película tuvo un muy flojo remake en 1997, dirigido por Michael Ca­ton-Jones e interpretado por Bru­ce Willis y Richard Gere, que narra el intento de asesinato de la primera da­ma de los Estados Unidos.