El proceso de Juana de Arco: Película sobrecogedora
El proceso de Juana de Arco | Bresson deseaba captar la esencia de una joven que «poseía esa sed de libertad y de independencia que tienen los jóvenes de hoy».
Cuando Bresson encontró en la delicada y hermosa Florence Delay la encarnación de su Juana de Arco, le pidió que fuera lo menos emocional que pudiera.
Quería retratar el alma de la Doncella de Orleáns. Y para ello le sobraban el guión y los actores. Sólo necesitaba la fuente histórica del sumario y del proceso de rehabilitación, su genio y una sucesión de planos y contraplanos, de su director de fotografía habitual Léonce-Henri Burel, al servicio del sonido lúgubre de los tambores del juicio y de los diálogos sobrecogedores entre Juana y el obispo Cauchon. La palabra por encima de la imagen.
Bresson deseaba captar la esencia de una joven que “poseía esa sed de libertad y de independencia que tienen los jóvenes de hoy”. Mostrarla como si viviera en el presente. A la joven Delay la encontró por azar, y sólo trabajó para él en esa ocasión. El cineasta francés casi nunca eligió actores profesionales sino lo que él llamaba “modelos” o “actores de un papel especial“. Florence era hija de un profesor y miembro de la academia francesa; el obispo, un pintor afamado de París; y los jueces, profesores, abogados, médicos, etc. “Los actores se esconden bajo su técnica y su arte. De esta forma -decía- aflora lo más profundo de cada uno”.
El resultado es lo que el escritor y académico Jean Guitton llamó “una obra descarnada” que nos conduce desde el primer plano de ese rostro suave y fuerte hasta su interior, donde asistimos a la brutal contienda que entablan el amor a la verdad y el temor a un suplicio injusto.
La Juana de Arco de Bresson es espiritual, muy distinta a la psicológica de Dreyer (1928) y a la terrenal y laica de Jacques Rivette (1993). Resulta sobrecogedora la mezcla de familiaridad con lo sobrenatural, insolencia para contestar al obispo o para callar hábilmente, intrepidez y dulzura. Escenas como la del breve llanto al conocer el veredicto o el camino urgente y casi infantil al tormento son antológicas. La crítica y el público supieron apreciar la severidad y pureza de su estilo. Fue premio especial del jurado de Cannes.
Ficha Técnica
- Dirección: Robert Bresson,
- Guion: Robert Bresson,
- Intérpretes: Florence Delay, Jean-Claude Fourneau, Roger Honorat,
- Fotografía: Léonce-Henri Burel
- Montaje: Germaine Artus
- Música: Francis Seyrig
- País: Francia (Procès de Jeanne d’Arc)
- Año: 1962
- Distribuidora DVD: Avalon
- Duración: 62 min.
- Público adecuado: +12 años