Saura(s)

SauraS: Carlos y sus hijos

· SauraS: Saura es un artista siempre atareado, que no mira al pasado como si la vida hubiera concluido, que mira al futuro pensando en nuevos proyectos.

Hace un par de años Virginia García del Pino realizó el primero de una serie de documentales sobre los grandes del cine español. La película se llamó La décima carta y versaba sobre Basilio Martín Patino. El proyecto «Cineastas contados» se inspira en la serie francesa «Cineastes de Notre Temps». Félix Viscarret es el responsable del segundo capítulo, Saura(s).

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¿Por qué Sauras, en plural? Porque Viscarret decidió no volver a contar la historia de Carlos Saura -narrada en numerosas ocasiones-, su idea fue hacer un retrato del cineasta, con ayuda de sus hijos: siete. Viscarret rueda al cineasta aragonés hablando con cada uno de sus hijos, comenzando por la más joven, Ana Saura Ramón -22 años-, y terminando con el mayor, Carlos Saura Medrano -59 años, su ayudante de dirección-. La mayoría de las secuencias han sido rodadas en estudio, en una composición inspirada en algunos de los musicales del autor: grandes paneles vacíos, preparados para llenarse de imágenes, de fotos familiares o de fragmentos de películas, y espejos; otras, en casa del autor.

El resultado es irregular, pero siempre interesante; Saura es un artista siempre atareado, que no mira al pasado como si la vida hubiera concluido, que mira al futuro pensando en nuevos proyectos. Le gusta su trabajo, le gusta utilizar las manos; las conversaciones son entrañables y tienden a mostrar que bajo la superficie arisca del artista hay un gran corazón que rebosa humanidad; muestra que quiere a sus hijos aunque reconoce que no ha sido el mejor de los padres.