Enemigos públicos: Crónica de un país agonizante
La larga carrera de Michael Mann como director, escritor y productor le otorga un peso innegable en la industria de Hollywood. Títulos como El último mohicano, Heat, El dilema o Collateral demuestran su versatilidad, aunque el resultado final de algunas de sus producciones sea ciertamente irregular.
Lejos de las playas de Corrupción en Miami, Mann se decanta en su nuevo proyecto por un tono más sobrio y una historia de gran peso político en el Estados Unidos de los años treinta: la historia de John Dillinger, un ladrón de bancos catapultado a la fama en una América deprimida económicamente. Con todo, a pesar de ceñirse a las directrices del cine de gánsters, Mann da un paso más allá acometiendo una renovación visual impactante y descarnada. Lejos de los filtros y del envejecimiento de films como Los intocables de Eliot Ness, Muerte entre las flores o Camino a la perdición, el director de fotografía Dante Spinotti apuesta por el desnudo y la tecnología digital, una decisión de un cierto riesgo pero resuelta de forma soberbia.
El gran valor añadido de Enemigos públicos reside en la fuerte presencia de sus actores principales, encabezados por un Johnny Depp siempre deslumbrante, en el papel de Dillinger, y un contenido, medido y frío Christian Bale en su interpretación de Melvin Purvis. En el nivel narrativo, el interés de la nueva obra de Mann se centra en la construcción del sistema federal que se estaba gestando en el seno del país, así como en la extraordinaria reconstrucción de la época. Los atracos fulgurantes y las evasiones imposibles se convierten sólo en el hilo que nos conduce a una reflexión más profunda sobre un período de caos en el que imperaba la ley de la calle y la supervivencia del más fuerte.
Retrato de un país agonizante, Enemigos públicos presenta una sociedad corrompida, sumergida en una espiral de violencia, traición y muerte. Lejos de plantear una polaridad entre los dos bandos que pugnan por el poder de las calles, se centra en un microcosmos cambiante y caótico a punto de eclosionar. Ágil y atractiva, la narración se caracteriza por una inteligente dosificación de la información y una acertada puesta en escena. Con guión del propio Michael Mann, Ann Biderman (Las dos caras de la verdad) y Ronan Bennett, Enemigos públicos es una obra perspicaz, impactante en el plano estético y bien argüida en el plano narrativo.
Ficha Técnica
- Dirección: Michael Mann,
- Guion: Ronan Bennett, Michael Mann, Ann Biderman,
- Intérpretes: Marion Cotillard, Johnny Depp, Christian Bale, Stephen Lang, Billy Crudup, Stephen Dorff,
- País: EE.UU. (Public Enemies, 2009)
- Fotografía: Dante Spinotti
- Montaje: Jeffrey Ford, Paul Rubell
- Música: Elliot Goldenthal
- Duración: 140 minutos
- Público adecuado: Adultos
- Distribuidora: Universal
- Estreno: 14.VIII.2009