¡Este rodaje es la guerra! Volúmenes I, II y III

¡Este rodaje es la guerra!
¡Este rodaje es la guerra!

¡Este rodaje es la guerra! | Aunque a a algunos les pese, el cine norteamericano es por de­recho propio el cine que entienden más habitantes del planeta, quizás porque es el más hábil a la hora de tocar teclas emocionales de carácter universal. Y es­to que sucede con sus películas, ocu­rre también con su Historia del Cine: nadie mejor que ellos mismos para contarla. A lo largo de casi un siglo han guardado memoria escrita de cada uno de los rodajes de sus películas míticas.

El escritor Juan Tejero, uno de los más veteranos editores de cine y colaborador habitual en algunos pro­gramas de radio y TV (actualmente participa en «Al sur de la mañana» de la COPE y en «Cha­nnel nº 4» de Cuatro), es el autor de esta singular enciclopedia que recoge un sinfín de anécdotas de algunos de los rodajes norteamericanos más conflictivos. En total, tres grandes volúmenes -más de 1.500 páginas- que exploran todo lo que sucede antes de que el proyector se ponga en marcha.

¡Este rodaje es la guerra!
¡Este rodaje es la guerra!

Además de su estupenda y cuidada edición -casi 5.000 fo­tografías, con un buen número de fotogramas originales de las películas-, un atrac­tivo indudable de esta obra es su carácter divulgativo: Tejero escoge películas tan conocidas como Star Wars, El padrino o Lo que el viento se llevó, títulos que combinan el interés comercial y artístico.

Como es lógico, las reseñas de los rodajes no tienen la misma calidad; algunas son excesivamente breves y concisas mientras que otras, como las de El mago de Oz o Lawrence de Arabia pueden resultar excesivas. Por otro lado, al­gunos echarán de menos un tono más académico, no tan centrado en los berrinches y amores cruzados de las estrellas de Hollywood, caracterizadas por su exceso de ego.

¡Este rodaje es la guerra!
¡Este rodaje es la guerra!

Aún con estos inconvenientes, estamos ante una obra bien documentada, que ayuda a valorar lo que cuesta sacar adelante cada segundo de celuloide. Más cuando el director de la película se llama John Houston y le interesa más cazar elefantes que rodar La reina de África. O cuando a uno le da por contratar a Marlon Brando, un estupendo pero intratable actor. O simplemente cuando escucha a Bogart en el casting diciendo que el problema no es que él lleve una copa de más, sino que el mundo lleva una copa de menos. Aunque nada comparado con lo de Francis Ford Co­ppo­la en el rodaje de Apocalypse now: casi se le mue­re Mar­tin Sheen en plena catarsis de interpretación.

Al final, uno entiende que en esta profesión el trabajo va unido a un punto de locura y que con los «artistas» siempre son necesarias grandes dosis de paciencia, que para eso son artistas. Como decía Billy Wilder al referirse a los caprichos en el plató y la impuntualidad de Marilyn Monroe: «Tengo una vieja tía en Viena que estaría en el plató cada mañana a las seis y sería capaz de recitar los diálogos incluso al revés. Pero, ¿quién querría verla?».

«Lo que el viento se llevó» y otras batallas campales
Sangre, sudor y lágrimas en el plató
Apocalipsis Final
Juan Tejero. T&B
Madrid 2003 / 2004 / 2005
511 / 591 / 526 páginas
Precio: 41 € cada volumen

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